Bioética

La mayoría de las prácticas biotecnológicas suscitan una gran controversia en nuestra sociedad. Ante estas nuevas posibilidades que se nos abren es necesario hacer una reflexión y determinar que medios justifican que fines.

Extracción de celulas madre

La polémica derivada de que estas investigaciones implican posibles abusos en la propia dignidad de la persona. Por ejemplo para la investigación con células madre totipotenciales es necesario extraer células germinales del cigoto en fase primaria ya que esta células son la únicas capaces de especializarse en cualquier tipo de tejido, sin embargo esta extracción  supone la muerte casi segura del embrión acabando con su vida futura. Por supuesto sería un gran logro acabar con enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, pero no parece compensar sacrificar la vida de una futura persona. 

En contra de esta postura se encuentran aquellos que consideran que el cigoto en fase de desarrollo aún no puede ser considerado persona por lo que esto nos lleva a otra pregunta ¿cuando el embrión adquiere el calificativo de persona y las leyes jurídicas que regulan los posibles abusos hacia los individuos se le pueden ser aplicadas? ¿En el mismo momento de la fecundación?, ¿ En el nacimiento?, ¿ Cuando es un feto de más de tres meses? ....

En nuestra opinión tras la unión entre el gameto femenino y masculino y la formación del cigoto, el organismo resultante tiene la capacidad de convertirse en un individuo adulto y por tanto debe estar sujeto a las mismas consideraciones que cualquier persona residente en la población en la que nacera.

Es decir el estado fetal desde nuestra perspectiva tan sólo contituiría una etapa más en el desarrollo del sujeto como pueden ser la infancia, la pubertad, la edad adulta o la vejez.

Una de las soluciones sería obtener células madre de organismos adultos que no presentarían una capacidad tan alta de dar lugar a otro tipo de tejido.

Proceso de la reproducción asistida

También son muy discutidas las técnicas de reproducción asistida, aunque están permitidas en la mayoría de los países; los que se oponen a ellas alegan que sólo un pequeño porcentaje de los embriones obtenidos en cultivos son trasladados al endometrio materno dónde dará lugar al feto. El resto de los embriones serán destruidos o utilizados con fines de investigación por lo que en ninguno de los dos casos podrán convertirse en un bebé.

Pero quizás las mayores trabas éticas para el desarrollo de estas técnicas podamos encontrarlas en lo relativo a la clonación y la selección de carácteres en el bebé como ojos azules, pelo rubio...

La primera práctica en lo que a humanos concierne está prohibido en todos los países del mundo, ya que la posibilidad de seleccionar carácteres "beneficiosos" de manera artificial podría ocasionar discriminación dentro de la sociedad entre los individuos clonados y los nacidos de manera natural.

Añadido a todo estas consideraciones hay que mencionar que muchas de las técnicas biotecnológicas conllevan algunos riesgos.

Hace más o menos un lustro un grupo de investigadores americanos descubrieron que la enzima telomerasa era un componente fundamental en el envejecimiento. Con cada división celular se iba perdiendo cierta cantidad del télomero del cromosoma dónde residía dicha enzima hasta que llegaba un momento que la cantidad de telomerasa era tan pequeña que la célula no podía dividirse. Este proceso es la base del envejecimiento.

Los investigadores pensaron que si introducían enzima telomerasa, la división celular podría llevarse indefinidamente y el organismo en la que la enzima fuera inoculada sufrirñia un envejeciemiento mucho más lento.

La verdad es que no se equivocarón pero con lo que no habían contado era que la telomerasa también está muy presente en las células tumorales; por lo que el riesgo de desarrollar cáncer tras la inyección de la enzima era elevadísimo.En las técnicas de recombinación genética siempre habrá cierta posibilidad de que lo genes se intercalen al azar, originando problemas desconocidos.

NUESTRA CONCLUSIÓN ES QUE LA CIENCIA DEBE SERVIR AL HOMBRE Y NUNCA EL HOMBRE A LA CIENCIA